Espacio Bertelsmann
«Diálogo para un futuro mejor»
Desde 2019 la Fundación Bertelsmann gestiona el emblemático Espacio Bertelsmann en Madrid. El Espacio es un lugar de encuentro y aprendizaje desde el que crear, de manera colaborativa, soluciones innovadoras para impulsar cambios sociales positivos. Y también actúa como facilitador y dinamizador de debates sobre temas de la actualidad.
El Espacio Bertelsmann acoge diferentes eventos. Por un lado, se da visibilidad al trabajo propio de la Fundación Bertelsmann y al de otras instituciones sin ánimo de lucro. Por otro lado, se puede alquilar el Espacio para eventos de otras entidades y empresas.
En cuanto a su programación propia, la actividad del Espacio Bertelsmann se concentra en tres líneas de trabajo:
Diálogos por el empleo juvenil
Se da visibilidad a los proyectos de orientación y Formación Profesional Dual de la Fundación, y de otras organizaciones.
Diálogos internacionales
Acoge temáticas europeas de actualidad gracias a la colaboración con la Fundación Bertelsmann Stiftung y otras entidades españolas.
Diálogos por el futuro
Representantes políticos y sociales comparten ideas y opiniones con jóvenes con el objetivo de cerrar la brecha intergeneracional.
La Fundación Bertelsmann impulsa cambios sociales positivos en España desde 1995, liderando procesos de reforma y desarrollando proyectos innovadores en ámbitos culturales, sociales, políticos, económicos y educativos. Su trabajo ha ido evolucionando con la sociedad: identificando necesidades reales de la ciudadanía y proponiendo soluciones innovadoras y sostenibles en el tiempo.
Desde 2014, la Fundación trabaja “Por el empleo juvenil”, apostando por el desarrollo de proyectos para fomentar una FP dual de calidad en España por un lado y, por otro, promueve un modelo de orientación académico-profesional integrador y sistémico.
Historia del Espacio Bertelsmann
Primera etapa:
El Espacio abrió sus puertas como Centro Cultural de Círculo de Lectores en el año 1992. Durante los siguientes años, se llevaron a cabo un gran número de conferencias, coloquios, ruedas de prensa, mesas redondas y exposiciones de alto prestigio. Muchos de los nombres fundamentales de la cultura, la política y la sociedad, tanto a escala nacional como internacional, participaron en esos actos. Durante esa etapa, el Espacio fue considerado como uno de los centros para el debate y el intercambio de ideas más emblemáticos de Madrid.
Segunda etapa:
La segunda fase comienza en 2013 con la venta del Círculo de Lectores al grupo Planeta. Durante los cinco años siguientes, el Espacio acogió, sobre todo, actos de empresas del Grupo Bertelsmann y también de otras organizaciones y empresas.
Tercera etapa:
Al inicio del 2019 empieza su tercera, y más reciente fase. A partir de este momento, la Fundación Bertelsmann se encarga de gestionar el Espacio Bertelsmann para convertirlo en un lugar de encuentro y aprendizaje colaborativo. Manteniendo vivo el espíritu de un lugar con casi 30 años de trayectoria en ámbitos culturales, políticos y educativos, incorpora originalidad e innovación para adaptarse a los nuevos tiempos.
Enric Miralles
El Espacio Bertelsmann fue construido por el prestigioso arquitecto Enric Miralles en el año 1992. La obra conjuga el hormigón de la estructura original, con un recubrimiento aerodinámico de madera de abedul y acero. A Miralles se le conoce por realizar obras innovadoras que facilitan la colaboración entre profesionales y disciplinas, con una marcada vocación internacional.
Se trata de la única obra del arquitecto en la capital y fue galardonada con el premio Ciudad de Madrid. Desde su construcción, el lugar es un punto de referencia para las visitas de estudiantes, arquitectos y aparejadores de paso por la ciudad.
“Ese desbordamiento de la energía interior se manifiesta también en la única obra madrileña de Miralles […], la remodelación de un bajo de la calle de O’Donnell para sede del Círculo de Lectores, que expresa ya en la fachada la colisión azarosa y la tensión inestable de los espacios interiores. Aquí, el aprovechamiento teatral de un local […] alcanza su paroxismo, con una sucesión de palcos colgados, tribunas suspendidas y escaleras ingrávidas que componen un escenario encantado para exposiciones, conferencias y presentaciones de libros.”
El País, 1993.